Mojado

4 de julio de 2009, independencia de los estados unidos de norteamérica y qué? eso, sólo eso y nada más. (...) La lluvia no para, el viento está atrasado y ni siequiera se detiene a observar. Hace dos años, dos años parece mucho tiempo y en el fondo así es, cambios, errores, alegrías, penas, carcajadas, llantos, caricias, abrazos, golpes, caídas y uno que otro sentimiento que se vuelve a revivir. Destino o no, casualidad o llámese como quiera, acabo de ver hace un rato s. Darko, la segunda parte de la película Donnie Darko, y ahí salía el 4 de julio, ¿coincidencia? o es que simplemete todo tiene que llegar a un principio, a un punto donde todo comenzó y donde se te estrella en la cara un maremoto de emociones y sentimientos, recuerdos, imágenes, y una sonrisa; cartas, sábanas, peluches y una lágrima se asoma, más imaginaria porque si no es de alegría no me interesa sentir el salado sabor de la tristeza. Dos años, ahora me siento más grande, pero sin dejar de pensar como el pendejo que soy, hace ya un año fue el día de mi independencia, ese día en que mi mundo se destruyó y creí que me secaría, ese día en que disfrute de beber hasta más no poder con la compañia de amigos, un carrete en el que las palabras no eras necesarias, mas las acciones lo dijeron todo. Destrozado o no, hace dos años todo comenzó y al año siguiente todo se acabó, ahora puedo hacer un balanze, y me doy cuenta de que está bien, sin duda nunca dejaré de convencerme de que todo lo malo sirve y de mucho, sin eso que te destruye no podrías avanzar y superar los obstáculos que la vida nos impone. Cuando me preguntan ¿cuál ha sido tu momento más triste ó tu peor momento en la vida?, no sé que responder, y es que no es que no los haya tenido, eso es imposible para cualquier se viviente, es que simplemente estoy seguro de que otro peor siempre está por venir, si no ¿cual sería la gracia de vivir? Si a mis 21 años ya hubiese experimentado el peor momento de mi vida no me gustaría cumplir 22. (...) sólo eso, la lluvia me recuerda que hace dos años igual la calle se mojaba, igual estaba en una casa, la diferencia es que hace dos años no estaba solo en "esa" pieza, mas comenzaba lo que sería el principio de un todo, un todo que ahora ha evolucionado a un algo, un algo más complejo pero más fácil de comprender, al menos eso creo, como la lluvia que cae cada año el mismo día a la misma hora, esperando encontrar a alguien que le agradezca por su visita y no reclame por que sólo viene de paso, yo espero recordar este "hace dos años", más que mal a mí si me gusta estar mojado y me he acostumbrado a sentir la calidez de mis calcetines al caminar por las posas del gran Concepción.