La tercera es la vencida

(...) y faltaba llorar, y faltaba que llegara la desesperación, la destrucción tomada de la mano de la crueldad y el frío sabor de un "no sé qué más hacer"... De a poco todo retorna a su lugar, el año comienza su partida y todo va ocupando un nuevo sitio, un mejor puesto para esperar la llegada del próximo año que ya está ansioso por comenzar su carrera, por ver qué pasará y por regalarnos mil sonrisas y millones de lágrimas. Así funciona la cosa, una medida de alegría por dos de tristeza, la receta perfecta para una vida equilibrada y con mucho sabor, sin muchas espectativas, pero con mil sueños en mente y una que otra ilusión. No sé que más decir, no soy ningún experto culinario con respecto a vivir, sólo soy un ser algo especial que se complica sólo y a veces nunca sabe qué hacer. Por ahora sólo queda sacar un numerito, tomar asiento y esperar nuestro turno. Por su atención, muchas gracias.

Afuera de mi facultad hay un árbol rojo

Y si ya no sé qué hacer? tal vez me cansé, pero que se supone que deba hacer cuando no hay salida aparente, cuando las soluciones están al otro lado de un río sin puente, ¿debo acaso arriesgarme y cruzar nadando aunque no sepa cómo hacerlo?, ¿debo acaso además ponerme una venda en los ojos y salir sin dirección? ¿Cómo se supone que debo saber qué hacer?, ¿Manual de instrucciones?, buena idea, pero lamentablemente no hay uno, creo que sería un buen invento que se trasformaría en una herramienta útil y práctica para muchas personas . Por el momento, debemos ver cómo nos las arreglamos sin manual de instrucciones ni garantías. Insisto en que debería haber un "servicio de ayuda" para la vida, con preguntas frecuentes como: ¿Qué hago cuando no sé qué hacer?, ¿Que pasa cuando el amor ya no es dulce y se transforma en algo doloroso?, ¿Por qué las personas pueden ser tan manipuladoras y llegar a transformarse en monstruos? o, simplemente, alguna especificación que nos explicara cómo encontrar nuestro propio botón de reseteo. Afortunadamente, y digo "afotunada" porque trato de ver lado positivo, lo que no nos mata nos hace más fuertes, pero sinceramente en estos momentos preferiría estar muerto y en paz que vivo y complicado.

Dolor v/s Nosequé

Pena, angustia, dolor, lágrimas invisibles que inundan mi corazón, el alma oprimida por una fuerza algo especial. Una bolsa de aire que parece ocupar todo mi interior busca algún lugar por donde escapar, lamentablemente no puede y sólo decide quedarse ahí y esperar. Esperar por algo, ¿esperar por qué? o ¿por quién?, ¿algún ser especial que venga a su rescate? nadie es perfecto, pero al menos me logré enamorar de una imperfecta armonía que ilumina mi ser, más demasiado diferentes son los puntos que emergían de cada directriz, incoherentes como estas palabras los razonamientos colmaban la lengua y arrojaban frases llenas de ira y desesperación, palabras que herían como dagas recién afiladas, justo en el punto donde se corta la circulación. Una sinfonía descontrolada controla la situación, algo loca y sin mucha comparación, compararse ¿con qué? ¿Para qué? ¿Cuál es la verdadera intención de ser humanos? de estar aquí ¿para sólo superar pruebas y encontrar el verdadero amor? El agridulce sabor de lo que es vivir, Já, me CAGO en esa puta frase, nadie me preguntó siquiera si quería probar ese sabor, si quería acaso sentir como mi lengua se quemaba lentamente mientras mi garganta se cerraba cada vez impidiéndome respirar, nadie se acercó a mí y me dijo: “ahora vienes tú, es tu turno, ve ala guerra, es hora de aprender”. Cuándo será el puto día que aprenderemos que no aprenderemos NADA, todo está aquí, nuestro pasado, nuestro presente y nuestro futuro son parte de lo que se puede denominar HOY, y es que ya estamos muertos desde el momento mismo en que respiramos por primera vez, morimos al abrir los ojos y al envenenarnos con imágenes y colores que al principio nos maravillan y nos dejan sin razón, de a poco todo va tomando forma y ahora sombras de colores son, mas con el tiempo te das cuenta que eran sólo los demonios que siempre estuvieron a tu lado, los mismos temores que nunca te han dejado en paz y los mismos que nunca te abandonarán. ¡Hey!, ¿qué sacas con llorar? nadie se ha quedado sin lágrimas por hacerlo, seguirán saliendo de tus ojos una y otra vez sin parar, nuestro cuerpo está compuesto por un 70 por ciento de agua, así que si lo deseas tienes mucho rato para probar cuánto puedes aguantar. ¿Qué para qué sirve? para nada, ese es el secreto, eres tú, lo que hagas, lo que digas, ya lo hiciste y ya es, ya está decidido y por lo mismo ya estás perdido desde el momento en que fuiste dotado de razón. Mas si una vez más me preguntaran, si retrocedería el tiempo para cambiar algo, para decir algo diferente, para omitir cierta información, para mirarlo de forma diferente, para reaccionar de otra forma en esa situación, para ver qué hubiese pasado si tan sólo esto, para simplemente ver que pasó, la respuesta es la misma y es No, lo haría una y otra vez, te besaría una y otra vez sin parar, diría las mismas cosas que he dicho hasta morir, gritaría al viento lo mucho que te amo y lo fácil que agotas mi paciencia, me lanzaría a tus brazos y cortaría el teléfono una vez más, esperaría por una llamada que nunca llegó hasta quedarme dormido y prepararía el mejor regalo para ti... por que sólo he aprendido que de algo sirve toda la mierda que se sufre y es para aprender que sólo se sufre por placer, por la poca capacidad de nosotros de ver las cosas de una forma más objetiva, y es que es imposible ser objetivo de verdad, no cuando no se puede definir lo que es OBJEIVIDAD, no cuando no hay parámetros que sean neutrales en su totalidad. No existen ahora y nunca existirán. Hasta que aprendas que no existe un ayer, un hoy y un mañana, mas que un eres, es y serás.